Desde las tranquilas y puras tierras que rodean los Himalayas, la sal rosada se extrae mediante un proceso 100% artesanal. Su riqueza y diversidad mineral generan colores que varían desde los tonos blanquecinos hasta los rosas y rojizos.
Comparada a la sal regular, la sal rosada provee más minerales, tales como el hierro, calcio y potasio. En adición a su alto contenido mineral, la sal rosada sabe exquisitamente deliciosa y aumenta el sabor real de las comidas.
Su color rosado proviene de una alga rica en hierro atrapada dentro de la sal durante el proceso de cristalización.